lunes, 13 de junio de 2011

4 PÁRRAFOS SOBRE LA LIBERTAD


La libertad es el engaño de los poderosos, los violentos, sobre la sociedad. La libertad no existe, si existiera los seres humanos dejarían de lado toda su humanidad, todo rastro de odio, de falta de entendimiento de lado. Por lo tanto la libertad si es por sacar definiciones, es el pretexto para hacer la guerra, ejercer la violencia. Justificación expiatoria para llevar a cabo una acción encaminada a buscar el poder y ejercerlo sobre todo lo que rodee a la acción. Nada más.

¿Es justificado ello en los tiempos en los que vivimos sean los intereses que sean? NO, detrás de la lucha por la libertad existe la lucha por justificar acciones de otra forma injustificables. Los tiempos que vivimos son los mismos tiempos que nuestros ante-pasados vivieron, las diferencias residen en que ellos guerreaban con piedras,lanzas o arcos, y nosotros lo hacemos con pistolas, cuchillos, misiles o bombas. Era el mismo motivo pero con diferente técnica. Nada más.

Soy pesimista convencido en que la era de las masas ha terminado y ha fracasado. La era de las revoluciones sociales se ha extinguido, ha desaparecido, y en su lugar solo quedan resquicios de falsas esperanzas encaminados a continuar una historia que bien podría seguir, pero cuyo coste ya se sabe cual es. La revolución ha de ser individual, los viejos mitos de la tradición heroica de la lucha del ser por saber quien es, y de nunca vivir conforme a unas bases establecidas por el sustrato social, ha de ser la máxima sobre la que el futuro colectivo se ha de asentar. Pero mucho me temo que hablo de imposible, de palabras que caerán en saco roto. Nada más.

Para que halla libertad ha de haber juicios razonados, y no juicios determinados. El problema de la sociedad y a mi juicio su confusión, es que nunca ha reparado en la gran diversidad de juicios, y no se ha dado cuenta de que todos ellos buscaban un fin determinado. Esto es, encauzar una verdad colectiva aunque mismamente pudiese ser una mentira enmascarada de verdad. No se han hecho juicios libres de todo sometimiento con el fin de buscar una verdad individual y no común. Además de ello se ha caído en la vulgaridad de confundir juicio con banalidad. A tal conglomerado de palabras de buena índole absurda, carente de sentido, se lo ha llamado juicio, y por lo tanto nunca se ha llegado a un planteamiento serio y verdadero. Se han tomado insensateces como conjuntos de valor y a ello se le ha prestado más atención que a lo razonable y no determinado por el tiempo y por las circunstancias. Pero es que estamos en el s.XXI, era de decadencia moral en la sociedad, y es como quien va a recoger peras a un manzano pensando que igual encuentra alguna en el suelo y aunque el manzano de manzanas, y esa pera pudiera ser de alguien que pasó por ahí y la tiró, de ello se vanagloria y seguirá pensando que igual el manzano, alguna pera da. Nada más.

Nada más...

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