sábado, 9 de mayo de 2009

NAVEGANTE DE IDA Y ADIOS.


Cuando en mi mundo,
Yo navegante,
a merced de las olas,
en mi barca me sumerjo...


Son las olas,
impulsos de mi corazón,
es la brisa,
mi suspiro, mi pesar.



Es el horizonte,
mi esperanza,
es la barca perdida,
mi soledad, mi naufragar.



Y a solas,
lima, lima,
allá en las profundidades,
la vida que sucumbe y muere,
y entonces soy Yo en el oceano,
resplando de al fondo,
la llama de la vida,
ilusión.



Y entonces lloro y lloro,
y mudo contemplo,
mientras la mar embate mi barco,
como lentamente,
el resplandor absobe mi vida,
y termina en el horizonte,
borrase mi rostro, mi luz,
solo perdurese mi eco,
...