Desgarrame el sonido del viento,
mas y tapame los oídos,
musa mía, de mi corazón roto,
que mas y no quiero oír,
puesto maldito, maldito es,
tanto como mi ser apagado,
en la citara de su pensamiento,
que ya no se oye tocar y tocar..., en la noche oscura...
-Soy valiente, soy valiente-,
y murmuro en mi soledad,
afestas troyanas, han mi corazón
sembrado de cadáveres,
inmundo y desgarrado,
pavoroso del su viento,
-¡ay,ay, tapame los míos mis oídos,
mas y no quiero escuchar más!-
Luz tenue que me inunda,
penetra ligeramente en mis ojos,
como en zumbido que mi corazón al averno mueve,
es la vida que no brilla,
dulce y amarga sonrisa del mio destierro,
en caminos a la perdición...
El miedo es quien me posee,
la soledad me mece en sus garras,
en la tortura de mente infame...
-¡Ay, ay, tapame estos mis oídos,
mas y no quiero escuchar más!-
