viernes, 3 de diciembre de 2010

MAR GALLEGO


Al cielo clamo libertad,
al mar clamo piedad,
pues acaso,
¿que haría sin ti,
amado mar,
que tus recuerdos,
peinan mis cabellos?

Y pienso y te amo,
mas solo es deseo,
el volverte a ver,
y pacer a tu lado,
cantar a una infancia,
en la cual tu me cuidabas,
y a tu lado,
amé al mundo.

Lejana está ahora mi madre,
Galicia, amor de mi vida,
lejana pero cercana,
mientras escucho a las highlands,
el sonido de las gaitas,
de tierras gaélicas,
que me impulsa a caminar,
y me siento como peregrino,
caminando hacía el horizonte,
que ardiente,
me impulsa en tu recuerdo.

Y a ti te quiero,
y a ti te amo,
patria querida,
Galicia amada,
nunca olvidada,
alma galega,
que siempre,
a mi lado,
tu estarás.