viernes, 22 de octubre de 2010

HABLANDO DE JOVELLANOS I


Hablo de Jovellanos, porque me interesa mencionarlo por ser un lector principiante en sus textos que este buen señor nos dejó escritos. En especial hay uno que encontré disperso por esos innumerables sites que hay en Internet dedicados a él, y el cual, me dispongo a analizar debido a su importancia.

En él, Jovellanos en el fragmento de su discurso de entrada en la Academia de la Historia, nos encontramos con que habla de varías cosas, entre ellas la historia.¿Qué es para Jovellanos la historia? Para él tiene el mismo valor que lo tuviera para con Cicerón, la historia es testigo de los tiempos pasados, es decir, nos da a conocer esos tiempos desaparecidos y es maestra de la vida. Al igual que Cicerón, Jovellanos considera que el hombre es como un pequeño átomo o partícula diminuta cuya existencia, grandiosidad e inteligencia se basa en el conocimiento del pasado, y por ende todas aquellas partículas que no conozcan la historia no podrán ser en definitiva nada, solo se limitarán a seguir presentes hasta su desaparición chocando unas con otras. Serán por poner un ejemplo último, como niños, vivirán en la infancia eterna y al sufrir los castigos de la vida se preguntarán pero no hallarán respuesta, por lo tanto el problema seguirá existiendo.

El estudio de la historia si se quiere presumir de ser justos y razonables sencillamente conviene e incumbe a todas aquellas profesiones que tengan alguna relación con el pueblo. Destacando en estadistas militares, gente del derecho y filósofos. Además se señala que todos pueden sacar muchas cosas además de conocimientos, como el hecho de aprender a ser personas, no ciudadanos del buen estado, que no es lo mismo.

Según Jovellanos la profesión que más puede obtener de la historia es la de magistrado. La argumentación es la de que el magistrado como tal debe estudiar otras cosas para el desempeño de su labor, e insiste en que es la historia lo que facilitará el conocimiento y el buen obrar de los hombres.

Así, como buen ilustrado en ese fragmento el cual hemos analizado brevemente, Jovellanos defiende el conocimiento y le da una dimensión moral, pues piensa que los seres humanos se harán mejor como individuos y en su trabajo, beneficiando a la sociedad. Así pues las ideas de Jovellanos en el ayer y el hoy siguen teniendo valor así como lo seguirán teniendo en el mañana. Por ello es necesario su desarrollo en la sociedad actual en la que a pesar de la extensión de la educación, sigue habiendo ignorancia en cuestiones de la vida. Es necesario por ello su desarrollo en una sociedad en la que falta en gran medida un sentido mora que este en la base de las relaciones con los demás, una sociedad en la que domina el individualismo colectivo en lugar del bien común.