ORGÍA EN LA MAR+FOTOS DE DICHO ACTO

Y La Mar me miraba, eterno suspiro mío,
pasión loca, la que a navegar me lanzó,
fiero, loco errante,
a abrazar mi destino, ante las aguas de La Mar...


SUSPIRO, ¡Y CLAMO A LOS VIENTOS, CUAN MARAVILLOSO ES ESTE MUNDO!


Cabalgo, solitario, Sol errante,
cruzo las arenas de la vida,
cada paso es un paso en la agonía,

en la merced de la tempestad,
que arrebatarme las carnes quiere,
mas y yo mismo, vivo, me desquito,
de lo que hubiera o haya de desquitar,
mas y no lo quiero,
y camino, ya no cabalgo, y me pierdo,
por la infinitud del horizonte,
y allá se disipan mis palabras con cada paso,
y son mis huellas barridas por la arena del tiempo, 
vagos reflejos de lo que algún día fui, 
de quien las pisó, que valiente, hacía el olvido, se lanzó,
fiero, loco errante...


¡ES LA MAR LA QUE A LO LEJOS, EN LA FRÍA DISTANCIA ME MIRA,
PERO LA ARENA LA OCULTA, LA ARENA LA BARRE, 
LA ARENA LA HACE LLORAR,
Y BROTAN DE LAS OLAS DISIPAS,
BROTES DE SILENCIO!


....


Cabalgo, solitario, Estrella errante,
es La Noche la que me ha venido,
la que vencido me ha postrado, ha.
Por doquier la veo, allá a donde miro,
cuan alma solitaria, me rodea,
y son los muertos errantes los que de nuevo,
al oído me susurran...


¡TROPIEZO Y CAIGO, ESTALLA MI CABEZA CONTRA LAS ROCAS,
MANA SANGRE DE MI CUERPO, LAS HERIDAS ME CONSUMEN!
¡CUANTO DOLOR, CUANTO DOLOR!


El Loco saca su cámara y a disparar ráfagas contra los espíritus se pone,
e intentar, huye de ellos, pero en vano, los espíritus le abrazan,
y El Loco más loco se vuelve aún, tuerto se vuelve a caer,
pero esta vez llorar ya no llora, y reír si que ríe, y mucho,
mientras disparar dispara, con su cámara de fotos,
brincando de un lado a otro, cada salto es un salto hacia la eternidad, hacía la inmortalidad,
a oscuras su alma le ilumina la senda, su llama es tan potente,
que arden las rocas, hierven las aguas,
los tres Soles se vuelven a unir en hermandad en el firmamento,
un cuarto, hembra se une a ellos,
y todos con ella fornican, y mana del cielo amor,
y las aguas hierven blancas y azules, 
al fuego ardiente destello.
Y va El Loco y sumarse se suma, y eyacula aún más si cabe,
para darlas, entregarlas su alma, amor, amor espiritual,
y sonríe, sonríe y baila, en la noche pagana.


Los demás huyen, El Loco esta solo, desnudo,
contempla a La Mar, pasada la orgía,
no ríe, no llora, solo contempla,
medita sobre una roca, en armonía con el mundo,
no calla porque nada ha de decir,
la hoguera ahora arde en su corazón,
ya no más tropiezos,  ya no más silencios ni alborotos,
El Loco ya esta cansado, y ahora su silencio impera,
sobre una noche que continua su transcurso, 
a la vera de la Luna extasiada, que mana brillo por doquier,
mana su frenesí desbocado, y así toda la noche pues seguirá...


¡GUARDA EL LOCO SU CÁMARA!


FIN DEL ACTO


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