CONVERSACIÓN CON UN RUISEÑOR. QUE HUMILLADO ME HA DEJADO

He lanzado lo que antaño fue un cigarrillo, ahora son cenizas y he dicho:

-Quiero contribuir al silencio,
con mi silencio,
con mi guitarra muda,
mi llanto tocando,
que al ojo púrpureo,
espera acompañar-

Y después me he puesto a bailar, ebrio de locura, con una botella de ron, con una pata de cristal.

Me he caido. Invalido, me he arañado la cara, sangrando, borracho de dolor,y he sonreido. Más luego ha venido el ruiseñor y me ha dicho:

-Estás como una puta cabra,
alma de cristal,
corazón de perla,
viento errante,
pulso desvirtuado-.

Le he sonreido, y le he dicho:

-Es cierto, te digo sonriendo,
no te sonrio a tí,
le sonrio a la muerte,
como una puta cabra,
con cuernos de azufre,
rabo de alambre,
pata de cristal,
bebiendo al son de Dante,
leyendo sus versos,
caminando de la mano,
brincando con Virgilo.

Alma de cristal,
corazón de perla,
viento errante,
pulso desvirtuado-.

Y me he marchado, a beber más ron, ebrio de locura, pata de cristal, rabo de alambre, cuernos de azufre.

Locura...